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Soy Olga Esparch,

la persona que va ayudarte a conseguir la salud y el estilo de vida que tanto has soñado.

Todas las personas nos merecemos tener una buena salud física y emocional, pero no todas están dispuestas a invertir en ellas mismas para conseguirla.

Mi objetivo como profesional es trazar una estrategia para conseguir el bienestar de cada uno, así como proporcionar un acompañamiento para no perderse en el camino.

Pero ¿cómo he conseguido crear un método capaz de mejorar la salud de las personas?

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Mi carrera comenzó en un Hospital de Girona.

Invertí todo mi tiempo y energía durante años cuidando a mujeres con cáncer de mama. En las consultas me preguntaban qué más podían hacer para cuidarse, evitar los efectos secundarios y sentirse mejor cada día, más allá de los fármacos y las operaciones médicas.

Cuando has invertido más de 20 años como enfermera viendo las dolencias y el día a día de las personas enfermas, eres consciente de que todos deberíamos cuidarnos más. Y de que es posible hacerlo.

Ayudar a los demás es el secreto para multiplicar los momentos de felicidad.
Al menos para algunos.
Al menos para mí.

En busca de más respuestas, seguí formándome en diversas áreas de la salud:

  • PNI – Psiconeuroinmunología
  • Dietética y Nutrición
  • PNL & Coaching
  • Coaching Sanitario
  • Inteligencia emocional
  • Neurociencia
  • Softskills
  • Psicobiología
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Puede que a ti también te haya pasado.

A veces la vida fluye de tal manera que parece que todas las piezas del puzle encajan a la perfección. De repente, como por arte de magia, todo cobra sentido.

En mi caso no fue un solo momento, sino que, cuanto más me formaba, más clara veía la relación que existía entre lo físico, lo mental y lo emocional.

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Fueron años documentandome, investigando y probando hasta que conseguí dar con la tecla.

Creé un método capaz de mejorar el estilo de vida y la salud de las personas.

Esta no es una de esas historias en las que la verdad aparece de repente, como cuando el doctor Alexander Fleming encontró la penicilina (el primer antibiótico) por error o cuando Newton descubrió la gravedad al ver caer una manzana.

Demostré que, cuando trabajas de forma integral el cuerpo físico (la alimentación, el deporte,…) y nuestro cerebro (donde habitan las emociones, sensaciones y pensamientos), los resultados son mucho mejores e incluso perdurables en el tiempo.

Todo está conectado.

Cuando una persona está bien (es fácil escribirlo, pero a veces no tan fácil conseguirlo), lo nota ella misma y los que le rodean.

Sin embargo, si una persona siente una dolencia física, probablemente eso tendrá un impacto en sus emociones, pensamientos y decisiones.

Y tú ¿crees que te cuidas lo suficiente o podrías cuidarte más (o mejor)?

Te he preparado un test en el que, gracias a las preguntas adecuadas, podrás detectar en menos de 5 minutos si tus hábitos y rutinas de cuidado son suficientemente eficaces.