Estrés o Ansiedad ¿Cómo controlarlo? [SÍNTOMAS]

La gente se perturba no por las cosas, sino por la visión que tiene de ellas.

Cada semana vienen a mi consulta, personas que quieren cuidarse y mejorar su salud. Para conocer bien dónde está el problema les hago varias preguntas.

Una de esas preguntas es si tienen estrés y la mayoría de las personas contestan: 

¿Lo normal, ¿no? Como todo el mundo.

Aquí está el problema.

No somos conscientes ni conocemos la respuesta de 2 preguntas muy importantes:

1. ¿Estamos en una situación de estrés?
2. ¿Qué efectos que tiene sobre tu salud?

Sé de cierto que más del 75% de mis clientes/as lo sufren y la mitad ya se ha cronificado siendo esto una parte de su problema de salud.

Tenemos estrés cuando:

• nos preocupamos continuamente por una situación,
• anticipamos lo peor que puede pasar sin centrarnos en ninguna solución,
• no dormimos bien,
• aguantamos muchos momentos de tensión,
• no nos priorizamos y sólo complacemos a los demás,
• no descansamos,
• no comemos adecuadamente,
• etc. 

¿Te suenan algunas de estas vivencias?

En este artículo te cuento varias cosas importantes para que puedas conocer más sobre la epidemia de nuestro siglo.

¿Qué es el estrés?

Es un estado fisiológico de alarma ante un agresor estresante interno o externo. Este estado es un mecanismo de supervivencia  adaptativo que sitúa al organismo a buscar un equilibrio funcional, para que pueda convivir con la amenaza.

¿Te puedes imaginar como reaccionaria tu cuerpo y mente si apareciera un león hambriento en tu habitación?

Todo aquello que surge en esos instantes como: taquicardia, sudoración, temblores, respiración rápida, máxima concentración de sangre en tus músculos, semiparada de funciones secundarias en ese momento (digestión, sexualidad, alerta etc.) nos sirve para “huir o luchar” y evitar al león y poder sobrevivir.

Cuando estamos en una situación de estrés experimentamos una respuesta psicológica, conductual y fisiológica para adaptarnos a tal amenaza.

Diferencias entre estrés y ansiedad

¡Qué confuso pueden ser estos términos! Y la confusión nos lleva a tener más dudas, más incertidumbre y más estrés.

Vamos a poner nombres a estas dolencias:

La ansiedad es un sentimiento de temor, miedo y/o pánico normalmente sin que la persona que lo experimenta conozca siempre el objecto amenazante. 

La ansiedad leve es una consecuencia del estrés, ya que este activa los mismos síntomas que se generan en el miedo.

Es importante diferenciar esta ansiedad puntual de reacción normal a un trastorno de ansiedad donde este trastorno psicológico perdura durante meses y a veces como reacción exagerada y desproporcionada al estímulo desencadenante.

Estrés y dolor de cabeza

El dolor de cabeza afecta a más de la mitad de la población mundial, y mucho más en mujeres que en hombres.

Si alguna vez lo has pasado sabes bien de que hablo, el malestar que produce y como afecta negativamente en tu vida.

¿Por qué el estrés puede provocar dolor de cabeza?

Tiene varios mecanismos de compensación del cuerpo, que pueden provocar dolor de cabeza:

• Vasoconstricción de las arterias
• Contractura muscular de cervicales y músculos temporomandibulares
• Incremento tensión arterial
• Mayor reactividad emocional al dolor
• Incremento de noradrenalina y adrenalina que a su vez activan la presión arterial
• Bajada de endorfinas que provocan una mayor susceptibilidad al dolor
• Liberación de grandes cantidades de histamina y prolactina que pueden provocar migraña

Además, provoca alteraciones en la cantidad y calidad del  sueño y emergen más las preocupaciones, convirtiéndose en un buen aliado en el dolor de cabeza

Algunos tipos de estrés

Poder clasificar bien en que tipo de estrés nos encontramos, va a ser de mucha ayuda para poner solución a su bajada de intensidad.

Según su duración:

• Estrés agudo: Reacción a una amenaza inmediata
• Estrés crónico: Reacción superior a 6 semanas donde surge un desequilibrio en la regulación hormonal que conlleva un agotamiento causando patologías físicas y/o psíquicas.

Según su calidad:

• Eustrés o estrés positivo:  Es el “Normal” en situaciones controladas. Tiene una función adaptativa. Nos sirve para afrontar retos e impide que caigamos en el aburrimiento o la apatía. 

• Distrés o estrés negativo: Es la respuesta patológica e inadaptativa.SE pierde el control. Desencadena al estrés crónico y provoca patología 

Según el factor estresante:

• Factores ambientales: temperaturas extremas, alta humedad, ambiente contaminante. Ruido, luz artificial, humo. No es lo mismo vivir en Canarias, que en una ciudad sofocante y con alta humedad como Bangkok.
• Factores socio-económicos: falta de recursos económicos, de apoyo social, vandalismo, guerras, religión.
• Factores alimentarios: Una mala nutrición va a provocar un difícil funcionamiento en la respuesta al estrés. La búsqueda de recursos alimenticios también va a ser una causa de este.
• Factores fisiológicos: Todo aquello que nos puede enfermar: falta de horas de sueño, obesidad, obesidad, dolor, alergias, infecciones severas intervenciones quirúrgicas, enfermedades causades por microorganismos, consumo de drogas, medicación. El ejercicio de alta intensidad y el deporte de alto rendimiento son unos grandes generadores de estrés.
• Factores emocionales: serían aquellos que tienen relación con el significado y gestión que hacemos de las experiencias que vivimos. Entre ellas está el miedo, la depresión, la ansiedad, preocupación, frustración, problemas de pareja, exigencia, culpa, falta de educación psico-emocional, baja autoestima.

Estrés en el trabajo

Pasamos más de la mitad de nuestra vida en el trabajo. Es allí donde experimentamos situaciones de más tensión, sobrecarga de trabajo, conflictos laborales, exigencia o desafortunadamente situaciones de looping. 

El estrés laboral está en el orden del día. Las empresas deben abordar estos temas de protección  psicoemocional a los trabajadores. Están obligadas según la Ley de Prevención de Riesgos preservar la salud emocional y física de los empleados.

Cada vez hay más empresas que se enfocan en la prevención del estrés por los buenos resultados que se obtienen en la productividad, bajadas de absentismo laboral y en la salud de los trabajadores.

Síntomas del estrés

Ahora que tienen más información sobre qué es, vamos a ver cuáles son los síntomas y signos, que  van a variar según en la fase que nos encontremos:

Fase de alarma: es la respuesta inmediata al agente estresante

Esto es lo que ocurre: 

• Activación del SN Simpático, adrenalina y noradrenalina
• Aumento pulsaciones y respiraciones
• Retención de agua
• Subida presión arterial
• Analgesia
• Agudización de los sentidos
• Sudoración
• Activación de la amígdala. Activas emociones como el miedo
• Disminución funciones digestivas
• Aumento ácidos grasos en sangre

Fase de adaptación: es la respuesta del organismo a volver a su equilibrio.

Aparece a partir de 60 minutos después de la fase I

Los procesos fisiológicos son:

• Aumenta la hormona cortisol que nos ayuda a sostener la respuesta al estrés y gastando muchísima energía.
• Aumenta la hormona DHEA para intentar compensar los efectos del desgaste energético del cortisol. 
• Aumento de las endorfinas

Como lo notaremos:

• Reducción del dolor
• Mejora del humor
• Sensación de bienestar y calma
• La mente siente que nos recuperamos
• Mejor capacidad de respuesta emocional
• Estimula la producción de energía

Reacción de resistencia: es la etapa patológica y de distrés.

Aparece después de 6 semanas mantenida la fase 2 por agotamiento de las hormonas

¿Qué pasa?

Bajan las hormonas que nos daban bienestar (adrenalina, dopamina, endorfinas)

Suben la prolactina y el cortisol

¿Cómo lo notamos?

• Más nerviosismo y malhumor
• Olvidos frecuentes
• Más dolor
• Sensación de malestar, de “echarnos años encima”
• Inhibición funciones del sistema de defensas
• Sensación de desborde y de no recuperación
• Cefaleas frontales,
• Disminución de la lívido
• Alteraciones menstruales
• Infertilidad, abortos
• Retención de líquidos
• Ansias de comer compulsivamente
• Falta de memoria y concentración
• Sensación de fracaso
• Fatiga
• Insomnios y pesadillas
• Sequedad de boca
• Dolores musculares
• Trastornos gastrointestinales (diarrea, restreñimiento, hinchazón, reflujo)

Fase de agotamiento. El organismo es incapaz de mantener el equilibrio.

Literalmente nos rompemos física y emocionalmente por falta de reserva de energía, ya que la persona no tiene los recursos para afrontarlo.

¿Qué ocurre?

• Baja la síntesis de cortisol, de dopamina y de DHEA

¿Como se nota?

• Mucho cansancio físico-mental con euforia de noche
• Cansancio en posición de pie
• Mente ausente, dificultad para tomar decisiones, aislamiento social
• Tendencia a las adicciones
• Respuesta emotiva exagerada
• Ganas de comer alimentos estimulantes y azúcar
• Bajada tensión arterial
• Mareos
• Insomnio, pesadillas
• Manos y pies fríos
• Canas
• Bruxismo
• Estrías oscuras en la piel
• Altibajos de peso
• Infecciones frecuentes
• Inicio de fallos orgánicos

Como controlar el estrés

Verdaderamente el control que debemos hacer sobre este es evitarlo en su fase crónica poniendo soluciones para que no siga avanzando, para preservar nuestra salud.

Vamos a hacer un croquis de la situación global:

• Lo primero que debemos hacer es conocer el origen de nuestro estrés. 

Es de causa ambiental, emocional, física o una mezcla de ambas. Una vez aislado el origen vamos a valorar cuantos estresores nos acechan y que peso ocupa en nuestra vida, cuando se repite, cuánto dura, con qué frecuencia e intensidad.

Después nos preguntaremos qué control tenemos sobre esta amenaza.

• La segunda parte consiste en reconocer como reaccionamos a él y cómo somos:

Es interesante conocer nuestra personalidad, nuestra capacidad de adaptación a los cambios, como nos comportamos cuando nos estresamos, qué y cómo pensamos.

Y finalmente tener datos biológicos de mi capacidad de adaptación al estrés relacionado con todos los factores biológicos como:

• Nivel de hormonas de estrés
• Estado del microbiota intestinal
• Valores de neurotransmisores
• Alteraciones genéticas
• …

Ahora que conoces cuál es la realidad, ¿qué puedes hacer?

• Eliminar o evitar el estresor. Lástima que esto no siempre es posible con tanta facilidad.
• Aprender nuevas maneras de gestionar tus emociones y pensamientos. La inteligencia emocional es de gran ayuda.
• Visualizar que es lo que depende de ti y que es lo que no.
• Encontrar un objetivo y un plan de acción que te guie a salir de la situación estresante.
• Corregir las alteraciones bioquímicas:
  • Comer saludablemente y con muchos alimentos antioxidantes (frutos rojos, uva, cacao, pimiento, brócoli…)
  • Evitar azucares simples, alcohol y café
  • Añadir ácidos omegas en tu dieta (pescado azul, nueces, semillas.)
  • Dormir 7-8 horas diarias de calidad
  • Evitar luz azul por la noche antes de acostarte, levantarse con luz natural
  • Tomar adaptogenos del estrés: ashwagandha, rodiola, ginseng, eleuterococo
  • Vitaminas B
  • Probióticos
• Hacer ejercicio físico moderado con intervalos de alta intensidad y baja intensidad. Por ejemplo: correr 2 minutos caminar 5 minutos
• Tener hobbies y retos
• Hacer ejercicio físico moderado con intervalos de alta intensidad y baja intensidad. Por ejemplo: correr 2 minutos caminar 5 minutos
• Tener relaciones “sanas”
• Técnicas de respiración (meditación, yoga, etc.)
• Contacto con la naturaleza
• …

Dudas resueltas sobre el estrés 

Espero que con toda la información de este post puedas dejar de buscar información y ponerte en acción para hacer de tu salud una realidad.

Puedes contar con mi ayuda si lo necesitas. Solo debes ponerte en contacto conmigo aquí.

Además te animo a realizar el TEST DE ESTRÉS, el test que he diseñado para ti.

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